Maskne ¿Cómo cuidar tu rostro de los granos por la mascarilla?
Sarpullido, irritación, enrojecimiento, acné y dolor en las orejas, son algunas de las complicaciones que se producen debido al uso de mascarilla por largos periodos de tiempo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), ha decretado que el uso de cubrebocas es indispensable en la protección y cuidado de las personas en el contexto de pandemia. Con esta nueva normalidad salió el nuevo término de Maskne (en inglés es la combinación de la palabra mascarilla y acné) puesto que el acné es una de las repercusiones más notorias ante el constante uso de cubrebocas, el que no sólo puede generar acné sino que complica condiciones en la piel ya existentes como; rosácea, dermatitis, rojeces, irritaciones, picazón, urticaria, descamación.
Según la dermatóloga, Sara Cherem, “el cubre bocas va a ocasión que retengamos la humedad de la respiración y del habla, esto hace que la piel se haga un poquito más grasosa, además de taparnos los poros, lo que produce comezón y lleva a una acumulación de células y sebo, los que cuando están cerrados son espinillas y cuando está abiertos, son puntos negros”.
Dentro de todo encontramos dos tipos de daños; el mecánico, producido por el rose, el que se puede notar la nariz, el mentón e incluso en pómulos y mejillas. El otro tipo es el producido por la humedad, los cambios de temperatura y la sudoración que se genera dentro de la mascarilla, en ello una piel mixta o grasa se verá más afectada debido a que el sebo aumenta.
Es indispensable el cuidado preventivo de nuestro rostro. Antes y después de utilizar un cubre bocas, es importante limpiar la cara, lo recomendable es utilizar limpiadores gentiles, evitar los productos con alfahidroxiácidos o betahidroxiácidos, por el contrario intentar utilizar aquellos que sean amigables con la piel.
Los limpiadores de pieles grasas normalmente tienen un ácido salicílico para contrarrestar la secreción de sebo, en este es aconsejable utilizarlo sólo una vez al día. Parte la nuestra rutina de skincare debe estar también enfocada en proteger la barrera cutánea del rostro, es decir, no exfoliar demasiado la piel, tener activos gentiles (como pantenol, miaceramidas, ceramidas o ácido hialurónico) reponer los lípidos para que nuestra piel esté fuerte, además de evitar los productos irritables o con mucha fragancia. Como la línea de limpieza facial de BioHerapy, que además es libre de parabenos y sulfatos, ayuda a mejorar la función de la barrera natural de la piel, calma la sensibilidad y no obstruye poros. El limpiador facial de lavanda de Tessa, también es una buena opción, puesto que no tiene preservantes tóxicos y ayudan a limpiar a profundidad la piel.
Otro consejo es disminuir considerablemente el uso de maquillaje, si aún así quieres darle una capa de color a tu piel, lo mejor sería afianzarse con los productos BB cream, CC cream, DD cream o protectores solares con color, y evitar las bases muy pesadas o polvos que pueden sobrecargar el rostro, provocando que la piel respire aún menos.